Antropología

Después de haber sido durante varios siglos tributaria de la teología (el hombre no podía ser comprendido más que con referencia a su Creador), la antropología deviene -con Broca(1824-1880) y Quatrefages de Bréau (1810-1892)- una prolongación de las ciencias de la naturaleza. Según Quatrefages, se trata de "una historia natural del hombre". Su objeto es describir y clasificar los diversos caracteres morfológicos de los seres humanos y analizar sus variaciones en el medio natural. Esta es la antropología física.
Este punto de vista se encuentra reproducido en la obra de un antropólogo francés: André Leroi-Gourhan, quien agrega el estudio de las variaciones en el medio humano. A partir de hechos biológicos como la posición vertical y la prensibilidad manual del hombre, André Leroi-Gourhan establece la relación con la técnica y el lenguaje. En sus obras "Milieu et Techniques" (1945) y "Le Geste et la Parole" (1945), descubre el juego dialéctico entre el medio natural, la biología humana y las técnicas, juego que dará cuenta, según su autor, de la diversidad de tipos y culturas.
Para la escuela culturalista americana, representada principalmente por Margaret Mead, Ruth Benedict y Erich Fromm, los tipos de comportamiento humano están en función de los modelos culturales (patterns) en vigor en el grupo. Margaret Mead ha dado sorprendentes ejemplos de inversión de los papeles masculino y femenino según los valores asimilados desde la primera infancia en el grupo social. Asimismo, una tribu tiene vocación de paz o de guerra por razones culturales. Existen culturas donde domina la armonía y culturas que privilegian la violencia. Los hechos culturales serán, en consecuencia, los antecedentes antropológicos fundamentales, pero el hecho cultural mismo debe ser, intepretado según esta escuela, a la luz del psicoanálisis.
También remite al inconsciente -aunque por otro camino- la antropología estructural de Claude Lévi-Strauss. Aplicando a la antropología las adquisiciones de la lingüística estructural y buscando resolver el problema de la prohibición del incesto, Lévi-Strauss descubre las estructuras de parentesco en que todas las variaciones resultan en reglas simples, que son las reglas de intercambio impuestas a los individuos en virtud de una lógica inconsciente.
Del mismo modo, el estudio de los mitos indica que se trata de estructuras semejantes a un lenguaje. Al analizar 187 mitos amerindios en "Lo crudo y lo cocido", este autor los enfoca como una unidad en cuyo interior existen correlaciones, permutas y transformaciones. Toda esta combinatoria es susceptible de un tratamiento matemático. También la antropología estructural introducirá la noción de un espíritu humano que ha elaborado desde el origen, de manera inconsciente, todos los sistemas lógicos posibles, donde los diferentes tipos culturales empíricos no son más que casos particulares.
En la interpretación del marxismo de Louis Althusser y en la obra filosófica de Michel Foucault se pone en tela de juicio la validez de la antropología. Respondiendo al valor epistemológico de concepto del hombre, estos pensadores no ven en la antropología una ciencia sino una ideología.